¿Tu Web No tiene Visitas? Haz Esto YA!

Arquitectura SEO Transaccional: qué es

Primero, déjame ponerte en contexto. Imagina que tienes una tienda física. No importa lo que vendas, lo importante es cómo lo presentas. Si entras y todo está desordenado, sin señalizaciones y sin una estructura clara, es probable que los clientes se sientan abrumados y se vayan sin comprar nada. Lo mismo ocurre con tu web. Si no tiene una estructura clara y optimizada, los usuarios se perderán y Google no sabrá cómo clasificarla.

La AST es esa estructura que le da sentido a tu web. Es como el esqueleto de un edificio. Sin él, todo se derrumbaría. Pero, ¿qué significa exactamente? Bueno, en términos sencillos, es la forma en que organizas y presentas el contenido de tu web para que tanto los usuarios como los motores de búsqueda lo entiendan y lo valoren.

Hasta ahora, en este curso, te he mostrado cómo hacer un estudio de palabras clave. Esa es la base, el cimiento. Pero la AST es el siguiente nivel. Es transformar ese estudio en una navegación clara y lógica para tu web. Por ejemplo, si tienes una tienda online de productos de belleza, no es lo mismo tener una página que diga «productos» que tenerla dividida en «maquillaje», «cuidado de la piel», «perfumes», etc. Cada una de esas categorías es una intención de búsqueda. Y dentro de ellas, puedes tener subcategorías como «labiales», «bases», «máscaras de pestañas», y así sucesivamente. Ahora, imagina que alguien busca en Google «mejor labial rojo». Si has hecho bien tu trabajo con la AST, esa persona llegará directamente a la sección de labiales rojos de tu web. Y eso, amigo mío, es oro puro.

Pero, ¿cómo sabes qué intenciones de búsqueda agrupar? Bueno, aquí es donde entra en juego el estudio de palabras clave que mencioné antes. Por ejemplo, en el caso de «irrigador dental», hay personas que también lo buscan como «irrigador bucal» o «limpiador de dientes con agua a presión». Aunque suenen diferentes, todas esas búsquedas tienen la misma intención: encontrar un dispositivo para limpiar los dientes con agua.

Entonces, lo que hacemos con la AST es agrupar todas esas búsquedas en una misma página. Así, cuando alguien busque cualquiera de esas palabras clave, llegará a la página que hemos optimizado para esa intención de búsqueda. Y aquí viene la magia: al hacer esto, no solo estás mejorando la experiencia del usuario, sino que también estás diciéndole a Google: «¡Eh, mira! Tengo exactamente lo que esa persona está buscando». Y Google, que al final del día lo que quiere es ofrecer los mejores resultados a sus usuarios, te premiará posicionándote más arriba en los resultados de búsqueda.

Pero no te confundas, la AST no es solo para tiendas online. Cualquier web puede beneficiarse de ella. Ya sea un blog, una web corporativa, un portfolio… Si tienes contenido que ofrecer y quieres que la gente lo encuentre, necesitas una buena AST.

Ahora, sé lo que estás pensando: «Vale, todo esto suena genial, pero ¿cómo lo hago?». No te preocupes, porque en los próximos apartados te mostraré paso a paso cómo crear una AST que haga que tu web brille con luz propia. Por ahora, lo más importante que debes recordar es que la AST es la forma en que organizas y presentas tu contenido. Es el mapa que guía a tus usuarios y a Google a través de tu web. Y si lo haces bien, no solo mejorarás tu posicionamiento en los motores de búsqueda, sino que también ofrecerás una experiencia de usuario de primera clase.

Así que, si sientes que tu web está un poco perdida, que no está atrayendo las visitas que debería, o simplemente quieres darle un repaso a su estructura, quédate conmigo. Porque juntos, vamos a hacer que tu web sea imparable.

Posicionar páginas por intención de Búsqueda.

Si quieres que tu página aparezca cuando alguien busca algo específico, tienes que decirle a Google exactamente qué es lo que ofreces. Y aquí es donde entra en juego la intención de búsqueda.

La intención de búsqueda no es más que lo que una persona espera encontrar cuando realiza una búsqueda en Google. Por ejemplo, si alguien busca «mejor smartphone 2023», probablemente esté buscando una lista o comparativa de los mejores smartphones de ese año. No está buscando cómo fabricar un smartphone ni la historia de los smartphones. Quiere saber cuál es el mejor.

Entonces, ¿cómo hacemos para que nuestra página se posicione para esa intención específica? Bueno, aquí es donde entra en juego todo lo que hemos aprendido hasta ahora sobre la Arquitectura SEO Transaccional.

Imagina que tienes una tienda online de smartphones. Si has hecho bien tu trabajo con la AST, ya tendrás categorías y subcategorías bien definidas. Pero ahora, vamos a ir un paso más allá. Dentro de esas categorías, vamos a crear páginas específicas para cada intención de búsqueda.

Siguiendo con el ejemplo anterior, podrías tener una página dedicada a los «mejores smartphones 2023». En esa página, ofrecerías una lista o comparativa de los mejores modelos, con enlaces a sus fichas técnicas, opiniones de usuarios, precios, etc. Todo lo que alguien que busca «mejor smartphone 2023» esperaría encontrar.

Pero no te quedes ahí. Piensa en todas las posibles intenciones de búsqueda relacionadas con smartphones. Alguien podría buscar «smartphones más baratos», «smartphones con mejor cámara», «smartphones para gaming»… La lista es interminable. Y para cada una de esas intenciones, puedes crear una página específica.

Y pensarás: «¿cómo sé qué intenciones de búsqueda son las más importantes?». Bueno, aquí es donde entra en juego el estudio de palabras clave que mencionamos anteriormente. Con herramientas como el Planificador de Palabras Clave de Google, puedes descubrir exactamente qué es lo que la gente está buscando y cuántas veces al mes.

Y una vez que tengas esa lista, es cuestión de ir creando páginas para cada intención de búsqueda. Pero recuerda, no se trata solo de llenar tu web de contenido. Cada página debe ser de calidad, ofrecer valor y estar bien optimizada para SEO.

Por ejemplo, si creas una página sobre «smartphones con mejor cámara», asegúrate de incluir información actualizada, comparativas, opiniones de expertos, imágenes de alta calidad… En resumen, todo lo que alguien que busca eso esperaría encontrar.

Y no te olvides de la navegación. Si has hecho bien tu trabajo con la AST, cada página estará bien enlazada con el resto, creando una estructura lógica y fácil de seguir para los usuarios. Y eso, amigo mío, es lo que hace que Google te premie con un buen posicionamiento

Cómo crear la clasificación de la Arquitectura SEO Transaccional

Para empezar, debes saber que la AST no es una tarea sencilla. Requiere de un estudio detallado de palabras clave y de entender a la perfección las intenciones de búsqueda de tus usuarios. Pero no te preocupes, porque te voy a guiar paso a paso.

1. Estudio de palabras clave: Antes de empezar con la AST, es fundamental que realices un estudio de palabras clave. Esto te permitirá conocer qué es lo que tus usuarios están buscando y cómo lo buscan. Por ejemplo, si tienes una tienda online de irrigadores dentales, es probable que descubras que hay personas que buscan «irrigador dental portátil», «irrigador dental con cepillo» o «irrigador dental inalámbrico». Cada una de esas búsquedas es una intención diferente, y debes tenerlo en cuenta para tu AST.
2. Agrupación semántica: Una vez que tengas tu lista de palabras clave, es hora de agruparlas semánticamente. Esto significa que debes juntar aquellas palabras clave que tienen la misma intención de búsqueda. Siguiendo con el ejemplo anterior, «irrigador dental portátil» y «irrigador dental de viaje» podrían tener la misma intención, por lo que deberías agruparlas en una misma categoría.
3. Creación de categorías y subcategorías: Con tu agrupación semántica lista, es hora de crear las categorías y subcategorías de tu web. Cada categoría debe corresponder a una intención de búsqueda principal, mientras que las subcategorías deben corresponder a intenciones más específicas. Por ejemplo, podrías tener una categoría principal llamada «Irrigadores dentales» y subcategorías como «Portátiles», «Con cepillo» o «Inalámbricos».
4. Optimización de la navegación: Una vez que tengas tus categorías y subcategorías listas, es fundamental que optimices la navegación de tu web. Esto significa que debes crear un menú desplegable que permita a tus usuarios encontrar fácilmente lo que buscan. Además, es importante que enlaces las diferentes categorías y subcategorías entre sí, para que los motores de búsqueda entiendan la estructura de tu web y la valoren positivamente.
5. Monetización: Si tu objetivo es ganar dinero con afiliación, como con Amazon, es fundamental que optimices tus páginas para convertir. Esto significa que, además de ofrecer contenido de calidad, debes incluir enlaces a los productos que recomiendas. Y recuerda, aunque un producto específico no esté disponible en Amazon, si el usuario hace clic en tu enlace y compra cualquier otro producto, ¡tú ganarás una comisión!
6. Actualización constante: La AST no es algo que hagas una vez y te olvides. Es fundamental que la revises y actualices constantemente, para adaptarte a las nuevas tendencias de búsqueda y a las necesidades de tus usuarios.

Optimización de la página para todas las palabras clave relevantes en tu sector

A estas alturas ya sabes que no todas las palabras clave son iguales. Hay algunas que son más generales, como «irrigador dental», y otras que son más específicas, como «irrigador dental inalámbrico». Y cada una de ellas tiene una intención de búsqueda diferente.

Por eso, es fundamental que, antes de empezar con la optimización, tengas claro cuáles son las palabras clave más relevantes para tu sector y cuál es la intención de búsqueda detrás de cada una de ellas. Una vez que tengas eso claro, es hora de poner manos a la obra. Y aquí te voy a dar algunos consejos para que lo hagas de la mejor manera posible:

1. Contenido de calidad: Antes de nada, debes saber que el contenido es el rey. Si tu página no ofrece contenido de calidad, relevante y actualizado, no importa cuánto optimices, no conseguirás buenos resultados. Por eso, es fundamental que, antes de pensar en palabras clave, pienses en tus usuarios. ¿Qué es lo que quieren encontrar cuando buscan esas palabras clave? ¿Qué información les es útil? Una vez que tengas eso claro, escribe contenido que realmente aporte valor.
2. Uso inteligente de las palabras clave: Una vez que tengas tu contenido listo, es hora de optimizarlo para las palabras clave. Pero ojo, no se trata de repetirlas una y otra vez sin sentido. Eso es lo que se conoce como «keyword stuffing» y puede penalizarte. En su lugar, utiliza las palabras clave de manera natural, en los títulos, subtítulos y a lo largo del texto. Y no te olvides de las variantes semánticas. Por ejemplo, si tu palabra clave es «irrigador dental», también puedes usar «limpiador dental con agua» o «irrigador bucal».
3. Optimización on-page: Además del contenido, hay otros elementos en tu página que debes optimizar. Estoy hablando de cosas como el título, la meta descripción, las etiquetas H1, H2, H3… Todos ellos son señales que le dices a Google sobre de qué trata tu página. Por eso, es fundamental que incluyas tus palabras clave en ellos, pero siempre de manera natural y sin forzar.
4. Enlazado interno: El enlazado interno es una herramienta poderosa para mejorar tu SEO. Se trata de enlazar unas páginas de tu web con otras, creando una estructura lógica y fácil de seguir. Por ejemplo, si en una página hablas de «irrigadores dentales inalámbricos», puedes enlazar a otra página donde hables de «los mejores irrigadores dentales del mercado». Esto no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también ayuda a Google a entender la estructura de tu web.
5. Optimización off-page: Además de todo lo que hagas en tu página, también es importante lo que ocurre fuera de ella. Estoy hablando de cosas como conseguir enlaces de calidad, mejorar tu presencia en redes sociales, conseguir reseñas positivas… Todo ello son señales que le dicen a Google que tu página es relevante y de calidad.

Importancia de la arquitectura SEO transaccional en la navegación del sitio web

La navegación de un sitio web es comparable al mapa de un tesoro. Si está bien diseñado, guiará a los visitantes directamente a donde quieren ir. De lo contrario, pueden terminar sintiéndose perdidos y frustrados. Es aquí donde la Arquitectura SEO Transaccional (AST) juega un papel crucial.

La AST no solo organiza el contenido de tu sitio de manera lógica y coherente, sino que también facilita la experiencia del usuario. Imagina entrar en una tienda donde todo está desordenado y no hay señales claras. Sería frustrante, ¿verdad? Lo mismo ocurre con los sitios web. Una estructura de sitio bien pensada asegura que los visitantes encuentren lo que buscan con facilidad, lo que mejora su experiencia general y aumenta las posibilidades de que se queden más tiempo en tu sitio.

Pero la AST no solo beneficia a los visitantes humanos. También facilita el trabajo de los robots de los motores de búsqueda, como Google. Estos robots rastrean e indexan el contenido de los sitios web. Una estructura clara y lógica facilita este proceso, asegurando que todas tus páginas sean rastreadas e indexadas correctamente. Esto, a su vez, mejora tus posibilidades de obtener un buen posicionamiento en los resultados de búsqueda. Además, una buena AST te permite segmentar a tu público según sus intereses y necesidades. Por ejemplo, si tienes una tienda online de moda, puedes tener diferentes secciones para «ropa de mujer», «ropa de hombre» y «accesorios». Esta segmentación te permite ofrecer contenido personalizado a diferentes segmentos de tu audiencia, lo que puede aumentar las posibilidades de conversión.

Por último, pero no menos importante, la elección de palabras clave es esencial para el SEO. Una buena AST te permite optimizar diferentes secciones de tu sitio para diferentes palabras clave. Esto asegura que atraigas tráfico relevante a cada página y que cada visitante encuentre exactamente lo que está buscando.

Uso de agrupación semántica para mejorar la arquitectura del sitio web

La agrupación semántica lo que hace es agrupar un conjunto de Keywords por su intención de búsqueda. Imagina que tienes un montón de palabras clave relacionadas con tu negocio. Algunas de ellas son muy específicas, otras más generales, pero todas tienen algo en común: representan lo que tus clientes potenciales están buscando. Ahora, el desafío es cómo organizar todas esas palabras clave en tu sitio web de manera que Google y otros motores de búsqueda entiendan claramente de qué va tu negocio y, lo más importante, qué es lo que ofreces. Aquí es donde entra en juego la agrupación semántica. Es decir, queremos juntar todas las palabras clave que, aunque se expresen de manera diferente, buscan lo mismo.

Pongamos un ejemplo para que lo veas más claro. Imagina que tienes una tienda online de zapatos. Algunas personas buscarán «zapatos de tacón rojos», mientras que otras buscarán «tacones rojos» o «zapatos rojos de fiesta». Aunque las palabras clave son diferentes, todas estas personas están buscando lo mismo: un par de zapatos de tacón rojos. Así que, en lugar de crear una página para cada una de esas palabras clave, lo que haremos es agruparlas y crear una única página que responda a esa intención de búsqueda.

Pero, ¿por qué es tan importante esta agrupación? Bueno, hay varias razones:

1. Claridad para los motores de búsqueda: Al agrupar palabras clave por intención de búsqueda, le estamos dando a Google una señal clara de qué trata cada página de nuestro sitio. Esto facilita su trabajo y, como resultado, es más probable que nos recompense con un mejor posicionamiento.
2. Mejora la experiencia del usuario: Al final del día, lo que queremos es que nuestros visitantes encuentren lo que buscan de la manera más rápida y sencilla posible. Al tener una estructura clara basada en intenciones de búsqueda, facilitamos que el usuario navegue por nuestro sitio y encuentre lo que necesita.
3. Optimización de recursos: En lugar de dispersar nuestros esfuerzos creando múltiples páginas para palabras clave similares, podemos concentrarnos en crear contenido de alta calidad para cada grupo de palabras clave. Esto no solo nos ahorra tiempo y recursos, sino que también nos permite ofrecer un valor añadido a nuestros visitantes.

Creación de categorías y subcategorías basadas en palabras clave buscadas

A ver, si alguien busca «cafetera», no quiere ver tostadoras o batidoras en los resultados, ¿verdad? Quiere ver cafeteras. Y si busca «cafetera express», quiere ver exactamente eso, no cafeteras de filtro. Aquí es donde entra en juego la magia de las categorías y subcategorías.

Las categorías son como las grandes avenidas de tu ciudad. Son amplias, generales y llevan a muchos lugares. En el mundo del SEO, las categorías son esas palabras clave generales que mucha gente busca. Siguiendo con el ejemplo de la tienda de electrodomésticos, podrías tener categorías como «cafeteras», «tostadoras» o «batidoras».

Las subcategorías son las callecitas que salen de esas grandes avenidas. Son más específicas y llevan a lugares muy concretos. En el SEO, las subcategorías son esas búsquedas más detalladas que hacen los usuarios. Siguiendo con el ejemplo anterior, dentro de la categoría «cafeteras», podrías tener subcategorías como «cafeteras express», «cafeteras de filtro» o «cafeteras italianas».

¿Cómo crear estas categorías y subcategorías?

El primer paso es hacer un buen estudio de palabras clave. No solo debes fijarte en las palabras clave más buscadas, sino también en cómo las buscan los usuarios. Por ejemplo, si descubres que mucha gente busca «cafetera express barata», esa podría ser una subcategoría perfecta para tu tienda.

Una vez que tengas tu lista de palabras clave, es hora de estructurar tu sitio. Crea categorías generales y, dentro de ellas, crea subcategorías más específicas. Y aquí viene el truco: cada categoría y subcategoría debe tener su propia página con contenido único y de calidad. No vale con poner cuatro fotos y ya. Debes ofrecer valor, información útil y, por supuesto, optimizar esas páginas para las palabras clave correspondientes.

Una vez que tengas tus categorías y subcategorías bien definidas, no olvides enlazarlas entre sí. Si un usuario está en la página de «cafeteras express», ofrécele enlaces a «cafeteras express baratas» o «mejores cafeteras express del año». La idea es que el usuario se quede en tu sitio el mayor tiempo posible y, para ello, debe tener fácil acceso a toda la información que busca.