Vas a comenzar a dar clases particulares de Yoga y eso significa que te enfrentas, de partida, a dos grandes retos. En primer lugar, hacerte un hueco y un nombre propio en un mercado con demanda pero con mucha competencia, sobre todo de centros especializados en tu misma disciplina. Y luego está el gran quid de la cuestión: cómo captarás clientes.
Los centros de Yoga apuestan por publicidad offline u online para darse a conocer, pero tú, que eres aún anónimo, como quien dice, y no cuentas con los mismos recursos económicos, qué puedes hacer para ganar visibilidad y arañarles clientes. La respuesta la tienes en el marketing online:
- ¿Por qué eres especial? ¿Qué te hace merecedor de ganarte la vida dando clases de Yoga? Analiza tus ventajas y virtudes y saca en claro cuál va a ser tu buque insignia. «Las mejores clases particulares de Yoga para gente mayor/embarazadas/al aire libre», por ejemplo.
- ¿Cuál es tu público objetivo? Conocer bien a tu reader persona y buyer persona simplifica sobremanera los siguientes puntos.
- Web bien posicionada para tu nicho de mercado y área de especialización.
- Optimiza tu sitio en las plataformas de geolocalización de negocios.
- Facebook, Twitter y Youtube son, en principio, los canales a los que les puedes sacar más partido.
- Las imágenes, vídeos y llamadas a la acción configuradas siempre con la vista puesta en los clientes.
- Una clase gratis a cambio de sus datos de contacto (email, imprescindible)
- Blog. Cuenta tu metodología, los beneficios del yoga, su historia, noticias, anécdotas. Esto te dará un barniz que pocos lucen.
- Testimonios de influencers o cuanto menos, recopilación de los de clientes satisfechos para que te recomienden.